#LaCitaExtrañaCon
Francisco Cervantes, Cantando Para Nadie,
Poesía Compleata, Ed. FCE. México 1997, pp413.
861M C47 C365. Biblioteca Vasconcelos,
ejemplar 9.
página 12 ... los carceleros armados
con ambiciones de usurero...
14 ... ama sobre la tierra como bestia
y muere pronunciando esas palabras sólo suyas...
18... cuando amaba oraba...
23... está desnudo y no tiene vergüenza
su sexo cuelga entre sus piernas como un mazo
lo miran...
lo observan
se le acercan en silencioen larga pausada hilera...
---
24... acepta y representa
con toda realidad
la farsa de estar vivo.
25... ese enemigo que es su precursor carnal...
27... sus maldiciones
tienen un olor furiosamente sujeto...
29... durme enroscado
en el fondo de todas las pasiones...
... apoyado en su soledad como en su sombra...
30... la muerte desbordándosele por ojos y axilas
32... y practica la técnica del superviviente
hasta tocar la orilla de ti mismo
y caer hacia la negación,
o a la afirmación o a lo que sea
aquello que llamamos muerte,
39... ondea su nombre
todo salpidado de su época...
50 Y un día en el que,
como en una gran mayoría de los de mi vida,
nada ténía que hacer, me puse...
---
* 53 El horadante amor desea la saciedad,
... traficante de miseria y llanto...
65... una piel cambiante como el agua...
68 Patria a la que acosamos traicioneros.
Suspended sobre mi sueño
El cuerpo desnudo que me fuera amado,
69... él sólo buscaba el placer
que la Compañía podía ofrecerle, ...
70 Florecerán los huesos con un alarido...
... laberinto en corrupción, ...
72 ... un vientecillo
enfriaba el hueco férreo.
75 Toda auténtica poesía es el precario testimonio
de un inapelable fracaso. ...
Los varones señalados recibirán la visita
de un brevísimo grupo formado
por quienes esperamos
largamente su advenimiento.
... la poesía - de Artaud y de Lowry,
de César Moro y de Luis Cernuda,
de Cardoza y Aragón y de Peret,
señalan un secreto manantial
que brota de este suelo
con un destino de desventura
y temporal olvido. ...
Sus Varones señadalos
se suman ahora a los escogidos...
---
88... que me la diga el viento,
quémela diga el viento,
que me la diga, él, viento.
---
95 Todo texto explicativo
o con visos de presentación
que intente agregarse a un conjunto de poemas,
o es una grave impertinencia
o una necedad inútil.
---
... estos poemas,
sin antecedente alguno entre nosotros
ni posibles seguidores, ...
... a él y a otros,
muy contados, espítitus impares y peligrosos,
que perpetuamente recrean el mundo
a su insaciable imagen
y a su intolerable e intolerada semejanza,
la vida puede seguir sufriéndose sin náusea mayor
ni definitivas escapatorias.
96 Un largo desvarío y desvelo
me hizo comprender su continuidad,
así ésta no fuera aparente.
---
... gracias a John Simon Guggenhein
Memorial Foundation,
cuyo bolso de trabajo me permitió regresar...
---
97 Cuando se está vivo se sueña.
Es posible todo en el sueño, menos el engaño.
---
147 LOS ASUNTOS
"SIEMPRE igual música y silencio
Cuando mayor fortuna",
Dice aquel hombre entre sus quejas.
Tú lo oyes y estás cierto
De que razón no tiene aunque la tenga.
Es claro todo y, si se quiere,
Todo oscuro.
Mas si posible fuera
Ser de este mundo un animal constante,
No la bestia de las dudas.
Hay aquello que define al hombre
A más de tales instrumentos
Y es su materia más palpable.
Seguramente no riquezas y miserias
Sino el hondo pozo en que se buscan:
El orgullo, la virtud que se le opone
Y todo aquello que le toca.
* CANTANDO PARA NADIE
LA CÓLERA, el silencio
Su alta arboladura
Te dieron este invierno.
Mas óyete en tu lengua:
Acaso el castellano,
No es seguro,
Canciones de otros siglos si canciones,
Dolores los que tienen todos, aun aquellos
- Los más- mejores que tú mismo.
y es bueno todo: el vino, la comida,
En la calle los insultos
Y en la noche tales sueños.
¿A dónde regresar si sólo evocas?
¿Amor? Digamos que entendiste y aun digamos
Que tal cariño te fue dado.
Pero ni entonces ni aun menos ahora
Te importó la comprensión que no buscaste
Y es claro que no tienes,
Bien es verdad que no sólo a ti te falta.
La ira, el improperio,
Los bajos sentimeintos
Te dieron este canto.
149 LOS SÍMBOLOS
UNO lo explica al otro, que interroga.
Mas uno más hay; éste oye lo explicado.
El mismo son quien habla solo, quien dialoga;
Quien está siendo y quien habrá pasado.
Después que se descifren sus mensajes
Y alguien, a voces, los divulgue
Sólo figuras, los héroes y linajes
Del tiempo serán, así la trama que los urde.
Pero nunca lo mismo representan
Que lo buscado por aquel que lo pensó;
Él sabe que "son los resultados los que cuentan,
Quiérenlo decir los símbolos o no".
157 PIENSAN LOS DIOSES
DENTRO de nubes, el diluvio.
Dentro el silencio, la fogata
Que algunos llaman vida.
Florece y si queremos inventarla
Algunos lloros y gemidos,
Unas pocas gesticulaciones
Y el énfasis de los muñecos esos
Que creen que ellos le ponen a sus pasos
Y sus actos.
Acostarémoslos y los levantaremos;
Nacimiento y muerte nombraremos
A tales movimientos.
Pequeños animales que, buscando,
Se obstinan en algo que no vale
La fatiga de su entendimeinto.
162 EL OFICIO de tu nombre,
Que no se nombra en vano,
Me hará el camino llano.
163 DE TESTIMONIOS Y SAUDADES
i ALÉM
Si el río nos permitiera entenderle su soltura
Y las aguas su forma deslizante
Inevitable y fresca,
Tal vez de ella aprenderíamos
La contraseña para entrar en vida calma
Y nos fuera dado usarla
Y al amor de su humedad tuviéramos visiones
De la existencia franca, sin límites hostiles
Que algunos llaman
Técnica y manto de intereses.
Visiones verdaderas aquellas que los actos,
Las pasiones engendran en el hombre
Si éste tiene la grandeza
En dejarse mover
y dar impulso a lo más alto de ellas,
Esto es decir, su centro.
Porque también las visiones nos contemplan
Y ay de aquel a quien nunca lo eligieron para verlas.
Visión la boca que te llama, el fuego que te dora,
La íntima sonrisa en que te internas.
Visión de tu alegría
Al sol y sus espectros.
ii AQUÉM
El amor dijo, ¿lloras?
Nunca veré otra vez
Esta luz sobre la tierra, respondí.
Ni aquí mismo siquiera...
(Perdonad la coincidencia). Era en Queluz,
Cerca al menos, a la entrada.
El sol se concretaba
En morena, mora suavidad, oh, la tersura.
Comimos allí un ritual de platos y bebimos
Por una unión que fuese placentera.
Había un testigo y mis saudades
Me desoían pero no yo a ellos.
iii ALGURES
El tajo aún corría en secreto
Cuando los párpados me internaron en mis sombras,
No siempre oscuras ni dolientes.
Las calles de Lisboa, la Avenida de la Libertad,
La Plaza de los Restauradores,
todo vuelve a mí con la dulzura
Un poco triste de aquello que nos es indispensable
Y no se tiene.
¿Qué soy, quién o quiénes
Que no me reconozco en alguien?
Doy letra y voz que no aguardé
A las ciudades y seres que me habitan
Porque son en mí lo que me dieron y no pierdo.
* Vivir hoy no me niega haber vivido
Y el libro de horas que existencia tiene en mí
Es un objeto vivo en su conjunto,
* Aunque sólo sentido halle
en quien lo hojea o lee,
Cuando se da ese encuentro milagroso y diario,
Acaso oculto en su misterio a vistas.
iv INVOCACAO
Lugares de reunión
Lo fueron todos,
Aquella noche que, semidesnuda,
Del balcón me despedías, esperando
Que tu conmovedora hermosura
me hiciera regresar al lecho tuyo.
Yo supe verlos como eran:
Desérticos, miserables, dolorosos
Ya sin ti.
Pero Lisboa,
Lisboa siempre fue más bella que tú misma,
Más bella que el destino y que su historia.
"¡Y que alguien como yo lo comprendiera!
Noche tan bella para mí si me volviera
A tu lugar de sueños y retozos.
No es un adiós, no me he partido
De ti, Lisboa, que entraste por mis ojos y mi boca,
¿Cómo tirarte de mí, ciudad que me ha querido
Y que amé desde el cielo, ya en el alba
Por fin, al encontrarla?
Ciudad mía, dirán que no lo fuiste,
Pero tú y yo soñamos con el mismo amor
Y somos uno de otro.
---
170 Hablando tus ficciones, tus dolencias,
Tus vicios, tu existencia,
...
Días largos, asaltantes
que herían, mataban
a otros peregrinos. Los señores
jamás nos protegieron. Franca
era la lengua nuestra y los dolores
francos también...
---
172 ROMANCE SUICIDA
PISANDO las hojas
De cobre mortal
Se pasa el Verano,
Caliente animal.
Se busca una sombra
A morir en paz,
Pero no es sencillo
Ni hay tranquilidad
Porque la agonía
No es de los demás,
Sino de uno propio...
¡Vamos, mía mitad!
Iremos andando,
Haciendo ademán
De que nada importa
¿A quién lo contar?
A un lado ramas
Inquietud nos dan,
cayéndonos secas
¿No nos secarán?
Tocando las lindes
De la soledad,
Se agotan los sueños,
La vida se va.
Pisando las hojas
De cobre mortal
Se pasa el Verano,
Caliente animal.
174 AULAGA EN LA MARALTA
LA LUZ del sol, la primavera
Ya nada nos reservan.
Más bien se siente
Cómo quienes por nos la observan
No son ya nuestra gente...
Ni estamos en la edad primera,
Que todo nos desoriente:
La luz del sol, la primavera.
Y si así sois, cansancio,
Nunca os daré por bienvenido:
Por vos bebemos vino rancio
No añejo, pues fue nuestro el descuido.
Al sol veremos como opaco
Ni brilla ni se apaga su quimera;
Pues fue servicio flaco
La luz del sol, la primavera.
---
178 Las heridas que le duelen le dieron la vida,
pero son tantas que resultan
más una tortura que alegría.
Son heridas latentes,
pero duelen por separado,
de una en una.
---
* 185 ... amándonos sobre el lecho
que llora la fugacidad del amor.
---
186 Y aquella gente que, de pura, manifiesta
Lo que no puede hacer, pues so su testa
...
La democracia de la muerte. Ahora ven.
---
189 Ay, no tengo arrepentimiento alguno
De la gente que halló muerte en mi mano.
A eso venimos a la tierra:
A dar muerte o recibirla.
Y ya logrado tal efecto,
¡A quién le importa?
No, no me da miendo estar muriendo,
190 Las viejas imágenes del soldado que murió
Hace unos días, en tierra extraña,
Matando por dinero,
---
LOS HABITANTES DE LA HOCHE
MIENTRAS el corazón reposa
La noche hace sus coágulos
Y entre los ojos de sus habitantes
Reparte su especial fatiga,
Más de obreros del desahogo
191 O inmundos conductos
que vuelven siempre al punto de partida.
Así quiero invocar esta torpe nostalgia
Que me nombra, ay, frente al destino.
Se bifurcan, crecen, avanzan
Las tenaces sombras
que el tiempo inyecta en todo cuerpo
Hasta dejarlo enjuto al hueso mondo
Y al hueso en polvo
que se dispersa y salta entre las rocas....
Quisiera saber
que ha pasado la noche que nos correspondía
Y que hemos sabido disfrutarla hasta la muerte
Porque todo después ha de ser el movimiento
que decrece
Hasta poder decir:
Mientras el corazón reposa
Oye cómo se te recuerda,
Con esa suave falsedad cuya simiente
ya estaba en los ojos de quienes miraban
Tus primeros actos de un salvajismo sofocante.
DEPOIS DE MANHA
PERO abrirías tus ojos, tardíamente,
Para elegir el viaje, no el sendero;
Quizá el meandro que te miente
Oiga verdad, y tú no seas sincero.
¿Qué puedes preguntarte y ante quién?
Amigo torpe, en vano instante,
A nada habrás de responder con bien
Tú que estás siempre distante.
* 192 DOCTRINARIOS DEL AMOR
CON silogismos y razonamientos
Llenaron páginas inútilmente.
No hallaron nunca los encantamientos
De la poesía, pues fue su mente
Sola entre sauces, vericuetos,
Por do van los caminos indicados.
Llegaron tan sólo a los secretos,
Mas no a sus jardines y los hados.
Y cuanto así pudieron descifrar
Práctica fue, vigilia, pensamiento.
Los sonidos repitieron, no el cantar
Que ellos creyeron aire, nunca viento.
Es así. Fue así. A este lugar
Vengo también yo, pues que lo intento.
193 DESDICHA, SÓLO FUENTE
COMPAÑÍA mejor nunca has tenido
Que aquella comprada turbiamente;
Otra hubieras para ti querido
Si, para los demás hiriente
Más para ti, que la has sufrido.
¿Será que tu desdicha es sólo fuente
Que mana para ti, y a tu pedido?
Pregúntate y en eso ya deténte.
Eres lo que tú tienes y no tienes:
No fortuna ni fuerza, tú dirías.
Más bien hoja a los vaivenes
Expuesta por años y por días.
Te nacieron amante a los desdenes
Y a quien te ama, sólo un galimatías.
202 ESPEJO CON DOS CARAS
COMO una falta en el cuaderno
Te tacharon.
Si te atacan, te dijeron,
Perdona, ten paciencia;
Olvida, aparta el rencor hacia el olvido.
Pero date a quien te ama mucho
Y más a aquel que te odia.
Los mismo le dijeron a tu opuesto,
Pero al revés que a ti.
---
204 NO SON tierras extrañas,
No evitarás la tradición ni sus entrañas.
Has devorado ya al profeta
Mas nunca lo digieres,
Allá, para ti, interno.
Lo oyes repetir anunciaciones
Y algo que nombrarías como desgracia
Si entendieras qué asunto no lo es.
Ni en ti ni para ti callarlo puedes.
El sol, avanzada ya la tarde,
Te da esa luz por la que tanto suspiraste.
Tarde, luz, Lisboa,
Ni dueño de ti mismo ni acompañado de persona
Conoce, reconoce, ve a través de tu mirada
Cómo las piedras son de piedra
Y tú de sueños y de sangre.
El viento sopla en tu cabello entre plantas.
Algunas hojas en el suelo van de paso.
Feliz, al fin, es el encuentro
De ti como tu desastre.
DOMINGO, EN EL JARDÍN CONSTANTINO
---
206 RECORRE EL ANSIA
EN EL largo aliento del secreto,
En el largo cabalgar de toda huida
Una pregunta es mucho para oírse,
¿Y cómo aspirar a una respuesta?
El pensamiento llega entre jadeos,
Su roto relinchar se apaga en agua
Y en pienso un poco amarillento.
Pero no hay nombres que se puedan invocar
Y menos aún los cuerpos que les corresponden.
Acaso quedarían los sentimientos en la cal
Al seco ardiente viento expuestos
Ya mondos y aun brillantes de la arena
Que tanto los roza y los arrastra.
Y corriendo, adelante, entre el rocío
Un gesto en telas desgarradas
Que lleva algún emblema a ras del suelo
Y parecería querer guiar a quien buscara
Alguna dirección o una esperanza.
El repaso de la asusencia, no se sabe
De qué o quién recorre el ansia
De esta arena venteada entre cortezas
Del fruto que Eva nos reserva si es que Eva
Hoy algo para alguien significa.
Nada fuera de la sed surca este mar del tiempo
Oh invento de los hombres donde naturaleza
fundó un desdén capitular
Que aún se oye vagamente
Y ya a nadie sorpendiera por más que sus salidas
A los mas extraños lugares condujeran,
Que habitados estuvieran de todas nuestras imposibilidades,
Pero ahí posibles y concretas, contantes y sonantes,
Como esa modena sólo buena
En manos de un cadáver del que sólo queda huella
Y que en breve el viento correrá con esta arena
Que no tiene sonido ni silencio.
Y entonces es que ya no hay nadie
Mejor que alguien siempre mejor que alguien.
Un olor de agobiada insistencia,
El repetido tropiezo de las valvas
De una maquinaria carnal que sigue estando
A merced del insomnio y la condena
De una conciencia donde no hay infierno
Y el alto azul copia y enfría
La yerta marea que va sellando las trampas del misterio
Que a solas, en un mundo de huecos,
Desanda y desenvuelve alguna esencia
En que a todos los que aquí asomamos
Impregna para de esa manera no dejarnos nunca.
210 HERIDAS QUE SE ALTERNAN
TE PREPARAS a salir,
Te habrás marchado
Antes de lo que tú quisieras
Pero después de lo que otros han deseado.
Tus pensamientos son amargos
Porque nacen, son
Heridas que se internan, heridas que se alternan
Y te amagan,
Te devuelven a ti mismo.
Pero se internan tanto
Que pronto han de cesar
Y cuando acaben
A ti será a quien habrán llevado
Más allá de todo,
Sin aceptación alguna o sin rechazo.
---
226 Islas humanas en abundantes haces
Y racimos de penas que navegan,
---
233 OIDO ENTRE DOS TUMBAS
Para Adolfo Castañón
Leer en el silencio y las cenizas:
el esplendor entero se nos revelará;
como abrir grandes ventanas a un astro
que no sabíamos que alli estaba.
Enrik Traden
(a través de la versión de José Régio)
ES CAUSA de infortunio grande
desear o no desear;
Retener, dejar pasar.
Es causa de infortunio grande
No tener infornunio
O pequeñas tragedias;
Padecer gran infortunio.
Es causa de infortunio grande
Contemplar, participar,
Saberlo e ignorarlo.
Es causa de infortunio grande.
Pero no basta la correspondencia
Ni clámides son pliegues que nos ornan,
La piel que las recibe tal caricia
Aprende y se acomoda;
Así de suave será sabiduría.
---
235 Podríamos haber sido los buenos.
Somos los malvados
En razón de la derrota
Y de la muerte.
...
Mas justo es destruyan
Al país antes de entregarlo.
Sin que lo digan,
Su obra grita:
Muerta está tu patria.
236 República,
Extraño nombre
Todavía no inteligible.
---
249 JARDÍN BAJO LA LLUVIA
AHORA, mientras la lluvia cierra espacios de bambú,
Recuerdas los veranos de tu infancia inestable.
Tal vez alguna tarde como ésta
Oyendo batir el agua contra el agua,
Su vana insistencia en una piel
que pronto pierde toda huella,
Donde nada, ninguna imagen persevera,
Tal vez por no poder dormir la siesta,
Te visitó un fantasma
que se dispersa sobre las verdes aguas.
A cambio del olvido;
Mas supiste del engaño
Y, al fingir que aceptabas,
Te hiciste la promesa de pensar todos los días
En ello, como un antiguo enamorado,
Sí, te hiciste la promesa de pensar todos los días
En ese dolor que te abate a voluntad de los dioses
Que otros ya olvidaron
Pero que tienen en ti un tiempo clandestino,
Porque sólo así se mantienen esas religiones,
Las únicas posibles.
Y desde entonces, sin quererlo a la tarde,
Aun durante los oficios más espesos
Esa memoria de tu infortunio acude
Tal vez sin que nadie lo note,
Mientras juegas la partida que ganas,
conversando con ella
o bebiendo sólo por demorar el silencio,
Te llega secretemente, se instala en tu llaga.
La tarde que no venga
Te ha de sorprender agonizante.
252 ARTE POÉTICA
¿QUÉ quiere decir
Necesidad
De escribir?
No busco responder
A esta pregunta
De pronto aparecida
En mi vida
Y en este papel,
Donde se junta tanta tinta.
No sé si mi poesía
Puede pasar,
Mas es posible.
No creo en ella
Por el sólo hecho de ser mía
Y de ser más
Que combustible.
¿Quién es ella?
Escribo muchas veces sin querer,
Cosas que ya en mi ser
Abundan desde hace tiempo.
Canciones mas improperios
Y dicterios.
Siempre a destiempo:
Debiera haber dicho antes
O haberlo cantado después.
Estas líneas lancinantes
Y algún canto de prez.
Oh, señor, bueno es oficio
Acorriendo a la emoción;
Este cantante es ficticio.
Por necesidad de la canción
Fue inventado
En el aire:
Entonces diréis: fue Cantado
para nadie.
---
257 ¿... Eres un libro en los estantes?
258 Más bien serías
Cómo ese libro que carga el ignorante
De un lado a otro una semana
Por todos sus recodos,
Sin leerlo.
Le sirve
Para sentir que lee.
---
... haciendo un inventario
De todo aquello que recuerdo...
---
264 BUZÓN DE ALTERNATIVAS
UNO sólo puede ser
Aquel que es,
Nunca el que hubiera sido,
El que debiera ser.
Ser es éste, no aquél
(Y aquí agotamos
Las posibilidades de pensarnos
Y de enunciar el ser,
¿Alguna sugerencia
Que se nos pueda hacer?
Anote usted la dirección,
Por si algo se le ocurre:
Calle de las Preguntas
Casi esquina con Callejón de la Amargura.
Espero sugestiones).
265 EL AJUSTICIADO
SI PUDIERA levantar la piel oscura que me sigue
Si las huellas no fueran obstáculos
Si las pisadas no se pusieran turbias
Si alguien me dijera dónde estoy
Y las olas se tragaran sus retorcidas imágenes
Si pudiera si no fuera pero nadie.
Brazos como círculos flores súbitas de dedos
Girasoles de todas las heridas
Pero la sangre bestia que nos sitia
Hermosa bestia que nos salva
Oscurece la agonía
Y abre compuertas al desdén.
Si me fuera dado pediría
Después de todo son serían mis últimas palabras
No regresaré la soga no se cierra sola
Puño de polvo y sombra
Recipiente de álgidos despojos
Olvido depósito de plumas
Que no frecuentaron otros siglos sigilosos
Y si me lo negaran
Negras cicatrices cruzarían
Las miradas de todos sus descendientes
No haya perdón no lo hubo
Oscuridad y ruido
Bajan de esta tela que me envuelve
Si alguien me dijera dónde estoy
Y las olas se tragaran sus retorcidas imágenes
Si pudiera si no fuera pero nadie.
* 270 SON DE COBRE
COMO una piedra pulida por el agua,
Al viento expuesta y a su larga
Caricia sollozada,
Esta lengua canta.
Hay seres que mueren cuando tosca
En labios torpes no se ajusta
Al sueño y su expresión: la vida diaria.
Éste es el oficio del poeta;
Ejercítalo en rigor, con suavidad segura
O calla.
Si no es ésta tu arma
No quieras tensarla;
Serás como el martillo
Que tunde al verano en unas hojas
Arguyendo: son de cobre.
276 MENGUANTE EN EL ESPEJO
EL PÉNDULO hoy no corta mi cuello
Ni lo salva.
Verdad es que míranlo distintos.
Mas opinión muy generalizada
¿A quien, reflejo de otros?
Luna que se asoma cuando Ella
Destaca sus formas y su cara
Menguante en el espejo,
Pero admirable siempre.
---
* 277 No hay escafandra
que te oculte del escándalo y la envidia.
---
Vosotros que abundáis en las prebendas...
vuestro nombre será el de nadie y aun menos.
Sólo para efecto de señalar el robo,
la insolencia o la ignorancia
Habré de mencionaros.
---
278 Todas las tierras son las tierras,
Ningunas son las otras.
---
282 CLAVES DE LA ESPUMA
A Vera Forte
CUANDO caiga el silencio como una enorme roca
Sobre los hombros reducidos a granos de la playa.
Cuando nos toquen los huesos de la despedida,
He de nombrarte.
Al mirar en otra dirección, que no la tuya,
El nuevo día se resiste a parecer.
No desabrocha el canto
Ni secreta el líquido del vuelo.
Pero espera,
Numen nuestro,
La música sinuosa de tus formas,
Reflejo de un sol que brota entre tus labios,
Claves de la espuma así en tu nombre.
Amor del cuerpo que es el alma,
¿Cómo no recordarte
Con saudade,
Carmen
Miranda?
---
285... salgo de mí cuando salgo
... vacuo soliloquio
---
286... vuestras almas
supersticiosamente pintadas,
... dios... nacido del miedo.
---
289 AL DICTADO DE LA FE
SE ESCRIBE lo que se siente,
Lo que se piensa;
A nadie extraña.
Monje de las armas o la cruz,
¿Son diferentes?
Se lucha con palabras
Y lo que dicen éstas.
Mas no siempre
- O casi nunca -
Véncese sobre del tiempo y su mensaje.
Nuestros santos señores
O terribles enemigos en el alma.
---
291 Es posible que tú quieras
que te exprese al expresarme.
Si así fuera, Señor, lo estoy haciendo.
---
* 310 Y a él acorro,
Para darme a ustedes hondamente
Más que simple objeto.
---
DESINSTRUCCIONES
Mínimo homenaje a Amalia Rodrigues
I
SI PUEDE andar, camine.
Tome el sendero equivocado.
Y no se arrepienta.
Va usted correctamente
Quién sabe a dónde.
Es la receta mejor medicinada
Y que más puede aprovecharse.
II
Ahora vamos a olvidarlo todo.
Primero lo complejo
y después lo más sencillo.
Sin alguna transición.
Podemos, si tal es su deseo,
Mirar hacia lo azul y así dejarlo
Suspendido en el aire
Y empezar de nuevo
(De todas formas
Siempre empezamos otra vez).
III
Para ser otro
Han de tomarse las siguientes providencias:
No pretenderse
Y - claro está - tampoco serlo.
Estas precauciones han de ser
Sencillas de portar,
Fáciles de seguir
Y destruibles al instante,
Para empezar de nuevo.
---
* 333 ... somos... esclavos
Del eco y del regreso
---
Nos han cribado,
También acribillado
(¿Será lo mismo?),
---
* 355... Donde viví mi infancia
Y adolescencia,
Eso que suelen llamar
"Mi casa" quienes se creen que algo es suyo.
---
NUESTRA ESPESA ENCARNACIÓN
(O Aleijandrinho)
I
DEDOS distantes
entre sí nos sacaron de las brumas
Y no brotó la voz, brotó la forma
Que así pudimos observar, no en ese entonces,
Sino en contadas ocasiones.
Objeto de leyendas en los aires
Y la porosa fe,
Que aceita apariciones, cinceladas
A todas luces en nocturnos moradores.
¿Podremos concretarlos
Con esqueletos, escaleras a tramos,
Sólo a tramos,
envolturas de una brisa
escasamente interrumpida?
Señor de la ira que nos labras
Con aliento de brandy y ajo.
¿Nos diste nacimiento?
Caen las vestes
Y la materia, nuestra espesa encarnación,
Definida en una sola pieza
O cada pieza,
Más de repliegues que de pliegues.
II
Un trueno imprime concisas espirales:
Concreta en tus figuras lo que vamos a invocar
Y podemos
Sólo porque quisiste
o te fue imposible no quererlo.
Los harapos y unos dedos
Movidos por un viento;
No cesaron los golpes que acudían de tus venas
Y hermosas pesadillas,
De esa forma atropellaron las plegarias
Para que fluyeran, más suaves, pasionales,
Y levantaran el tablado de nuestras tribulaciones.
Y enemistades
A quienes acusar
Para que castigaran celestes tribunales.
Señor, más que señor,
Mayordomo de nuestras ansiedades,
Te agradecemos, padre, que les hayas otorgado
El gesto que hemos visto
En el alma, acaso nuestra alma.
---
* 369 ... la playa, cuyas aguas congeladas
no eran aguas. Eran un espejo.
- El espejo del universo - ...
---
376 EDIFICIOS REFLEJOS
ALREDEDOR de ti se congelan
las campanas, las campánulas.
Viento eras y aroma imaginado,
que se filtra en una herida;
arde y frota contra ella sal.
Agua que se llaga, así invasora.
Nada la detiene,
tras su escudo de dolor atroz.
Señora aun cuando sin trono.
Si hubiera puente para huir
que nos hurtara a las llamadas presurosas
de su terca superficie donde cae el sol.
Que nunca dejes de dolerme.
Que a donde mire encuentre tu reflejo.
No hay reposo hasta la muerte,
¿para qué el reposo,
lecho de piedras y de espinas?
Aun en sueños me persiques y me dueles.
Reflejo que invento y que me inventa.
Te edifico.
Me construyes.
---
OJOS POR TELÉFONO
AL RASURARSE, vio que tenía los ojos de otro.
Y por su parte, los ojos le miraban con reproche.
No obstante, salió a la calle.
En su despacho, su secretaria lo saludó sin mirarle.
Cuando el primer cliente acudió a hablar con él
y empezó a exponerle su caso, se detuvo en seco,
tras las primeras palabras.
No era alguien que lo conociera demasiado,
mucho menos un amigo.
- ¿Qué le sucedió en la cara? - preguntó.
No supo qué constestar.
Así sucedió con todas las personas
que fueron a verlo.
Pero sentía terror por la hora de salida,
cuando llegara Berenice.
Tomó el teléfono.
Muy despacio marcó los números.
La escuchó.
- No vengas por mí.
Por favor espérame - le dijo.
Berenice estaba a la expectativa.
- ¿Qué te ocurre? - habló por fin -.
Se te oye una voz distinta,
como si algo te hubiera pasado en los ojos.
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* 378 Tú eres tu propia droga.
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* 379 FLOR PUTREFACTA
EXTRAÑA flor la de la creación,
putrefacta o vana, extraña, siempre y enfermiza,
ascendiendo por escaleras a medias abandonadas,
en casas a medias habitadas, a medias construidas,
llamarada sin más fuego
que el de alguien que no sabe cómo lo obtuvo
y que se asombra a cada instante
y que repasa a secas sus costillas,
sus noches alineadas,
sus recuerdos a duras penas vivos,
su vida atrapada entre sueños y pastosas realidades;
sube la flor, crece al amparo de oscuros soles
que brillan sin nada que alumbrar,
sin razón de ser soles.
Extraña flor cuyas raíces cancerosas
ni con la muerte de la carne
donde fueran sembradas desaparecerá.
Envenenada o salutífera, ay,
que no importa que no importe,
siempre en descomposición
o de una imperdonable y obscena salud.
En ondas se siente su presencia,
y crece dentro de mí
sin nada que lo impida o que la impulse.
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* 381 ... la muerte...
es triste accidente
en floración hermosa y constante,
... la vida sigue, ...
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382 ... servían al Rey Dom Affonso.
383 ... mesuradas... libaciones...
apenas... hacen... mojar sus labios y su alma.
... Algunos lo confunden con aquel rey castellano
y lo llaman igual que a él.
384 El rey Dom Affonso
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* 389 EL PRINCIPIO de las alucionaciones
está en la voluntad de superar el dolor
de quienes las aceptan o crean.
Mas las alucionaciones se generan
en la consistencia que necesita adquirir
la imagen proyectada,
para desplazar a las figuras
que lo inevitable sucedido pone en movimiento,
a partir de la escena dada por infortunada, ...
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390 FLORESTA DE LAS EMOCIONES
DE PRONTO
Un árbol delgado
Sale detrás de otro árbol.
Y luego otro,
Y otro,
Hasta que se organiza el bosque.
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393 APELACIÓN A LA PALABRA
PALABRA
¿Recuerdas a aquellas que nombraste
Más allá del fuego, en la pasión,
Ardiendo el alma como hoja de otoño
Tormenta u ola en la galerna?
Nunca fuiste extraña
Más bien materia incendiaria
Toda filos, de sangre nunca coagulada,
Dolorosa y placentera,
Placenta y contenido
Ya desarrollado,
Pero ya hoy, palabra sin edad,
Séme grata:
Ensáyate a ser tú
Y ensáñate a ser tú,
En tanto que te toco, tomo
Y te pongo en el papel.
alárgate y extiéndete,
Encógete y maldice
O
Quítale todo sentido a mi palabra.
Cuéntanos o cállanos,
Palabra.
Pero, ¿nos contemplas o nos sabes?
Nos ignoras y nos borras
De tu libro de citas y gomorras,
De tu libro de horas y de aves.
394 LA OBRA SOÑADA
¿RECUERDAS la mañana en que te despertaste
buscando ansiosamente el libro aquel, que
habías escrito para documentar tu grandeza?
Tus ojos bordearon lomos y portadas, tus
ánimos se despeñaron entre pilas de lecturas.
¿Quién eras tú, que despertabas a la constante
de una obra?
La presencia del sol te devolvió la cerrazón
que creíste espacio expresivo. No estaba allí,
ni en parte alguna. Si lugar tenía era en tus sueños
y la memoria de ellos.
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400 ... mi interpretación
Requiere corazón
Esto es decir: espíritu
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Vocabulario
398 liza, 395 frugal, lábaro, 393 galerna,384 ayo, enjaezada, trevas, 382 boneco, 380 arraial, 377 moruno, 373 anfractuosidades, 355 vestes, 354 arriates, 353 cyránidos, liminar, 349 chanzas, 346 desatinos, 339 obsede, lato, 338 estampía, 334 yelo, 310 acorro, 299 rellanos, 298 ridiclo, munido, 292 amanuense, 291 tremolar, 290 alevosías, 289 cartaz. 286 frémito, 284 lasitud, lacénico, 279 parafusos, tándem, 274 hifen, 272 mora, ciliares, 264 borrasca, miseranda, 263 olifantes, clangores, 262 elegía, 252 dicterios, lancinantes, prez, 244 recoletas, 234 intonsas, 233 ornan, clámides, 227 allende, 226 yatagan, cuitas, 225 combés, astrolabio, 224 venablo, 222 tremolantes, estilete, 210 gonfaloneros, alamares, estupor, regatos, 209 pastiche, húsar, 208 sestear, 207 valvas, yerta, 194 huera, 191 mondo, meandro, 168 oronda, 142 hieroglafías, 122 serpeó, 106 espolón, 102 donosura, 95 lusitano, 90 Horada, 81 cintilan, 80 vacuamente, 79 álgido, 73 clangor, 72 Anáglifo, 70 arreos, hollado, 67 estampía, 65 légamo, abluciones, hendir, 48, zafio, 15 mandobles.
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Nota: márgenes 13 mm todos los lados
para perforar.
tamaño del papel: carta angosto. 10.8 x 27.9 cm.
cortar con escuadra.###
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