#LaCitaExtrañaCon
José María Valverde,
Obras Completas Volumen I, poesía,
Ed. Trotta, Madrid 1998, pp 435
861 V35 0272 Ejemplar 2
página 9 ... ver el anclaje...
entre poesía y pensamiento, ...
... lo que a él mismo le gustaba ser o
le gustaba que los demás creyeran que era. ...
11 ... exhibicionismo obsceno... o...
la discreta ocultación de lo más importante...
su elegancia, ...
... conversación ... ingeniosa,
con continuas citas literarias y juegos de palabras, 
... a veces, llegaban silencios...
12 ... un religioso irreverente.
13 La faceta principal de José María
fue la palabra conversacional y, antes,
el silencio en que esa palabra se apoyaba.
La poesía vendría en tercer lugar.
16 ... la poesía, un territorio de ... diálogo...
17 ... pies de fotografías, ... esas miniaturas.
La pluma afilada de Karl Kraus ...
18 ... de hegel... el aufheben. ...
dentro de su sistema de ironía. ...
... el teatro de marionetas de Kleist.
20 La ironía le salvó de la desesperación,
de su pesimismo y de la negrura
en que veía a la humanidad...
21 Tenía el sentido de la paradoja
y del constraste...
23 Unamuno:
"El mundo espiritual de la poesía
es el mundo de la pura heterodoxia,
o, mejor, de la pura herejía..."
Antonio Machado:
"la poesía es palabra esencial en el tiempo";
Cernuda:
"No sé nada, no quiero nada, no espero nada..."
Alberti:
"... mi poesía esta... al servicio
de... una razón revolucionaria".
25 Deus absconditus, ... :
"Tú no nos das el mundo para que lo gocemos, /
Tú nos lo entregas para que lo hagamos palabra".
"¿Qué habrán sido los hombres en tus ojos?
27 ... silencio de donde huyen las palabras
 portadoras de "brillantes ideas"
y al que acuden las palabras que hablan
" de cosas verdaderas"...
32 La forma poética vive
tanto de presencias como de ausencias.
34 José María Valverde, ... :
el llamado de la poesía a la justicia
y al amor entre los hombres.
40 "Siempre he estado " "en noche oscura",
sin poder saber si soy de veras creyente,
ni si he rezado de verdad
cuando  he pedido ayuda
para mi apistía (incredulidad) ...
Sirviendo siempre a tres o cuatro señores
y reservándome a mí mismo,
sobre todo mentalmente
- pidiendo creer, pero en mis términos,
sin entregarme, sin obediencia total".
50 Las claves de la Historia,
los pies de las fotografías son de J. Ma. Valverde,
Planeta, Barcelona, 1990-93, 25 vols.
51 San Juan Evangelista:
Apocalipsis, trad. y prólogo de J.Ma. Valverde,
Bruguera, Barcelona, 1981.
55 El total del proyecto de edición
de las obras completas de José María Valverde
comprenderá no menos de cinco volúmenes:
Poesía (volumen 1), Interlocutores (volumen 2),
Estética y teoría literaria: Escenarios (volumen 3),
Historia de las mentalidades (volumen 4) e
Intervenciones (volumen 5).
62 ... la carne del poema...
63 ... Antonio Machado... la misión del poeta
es inventar nuevos poemas de lo eterno humano,
historias animadas, que siendo suyas, viviesen,
no obstante, por sí mismas".
64 ... la poesía debe echar luz
por encima de las cosas,
pero no explicarlas, no resolverlas.
... la poesía debe dar voz a los anhelos perennes
del corazón del hombre,
pero que no es quién para aclarar
sus vías de resolución;
que es todo y es nada;
que nos pone delante el ser
sin hacérnoslo poseer en lo más mínimo. ...
68 ... la lección... saber limitar el empeño
de cada poema a su terreno propio,
sin pretender... resolver
"vida y muerte", "cielo y tierra"
... la poesía ... es... echar luz
por encima de las cosas
y la vida para que ahondemos
más en su inagotable realidad,
aguas vivas... latido... rumor... promesa.
* 69 La poesía es la raíz perenne
desde la cual puede renacer
la literatura del porvenir,
que... vendrá... de la voz hablada.
... poesía polifónica,
... Él y yo... en diálogo o en coro,
... un poema
que, ... pretende "instruir deleitando"...
72 ... la obra de un poeta es, por sí sola,
su única biografía válida, y además
hace, o debe hacer superflua toda exégisis crítica.
Pero ... 73 ... no faltará quien
nos hermeneutice a su gusto...
como yo, Poncho Pochenko en la #CitaExtraña...
76 ... consideran que vale más
aplazar su sustitución
mientras no se pueda hacer
con arreglo a los causes liberales reglamentados...
80 ... poema... "El poeta"
Der Dichter    
El poeta
Du entfernst dich von mir, du Stunde.
  Hora, te alejas ya de mí.
Wunden schlägt mir dein Flügelschlag.
  Me hiere el golpe de tus alas.
Allein: was soll ich mit meinem Munde?
Solo, ¿qué haré yo con mi boca?
mit meiner Nacht? mit meinem Tag?
¿Y con mi noche? ¿Y con mi día?
Ich habe keine Geliebre, kein Haus,
No tengo ni amada, ni casa;
Keine Stelle auf der ich lebe.
no tengo sitio donde habite.
Alle Dinge, an die ich mich gebe,
Las cosas, a las que me entrego,
werden reich un geben mich aus.
se enriquecen y me disipan.
Rilke es un poeta estupendo,
que suena muy bien. ...
85 ... un poeta alemán
llamado Christian Morgenstern,
... Murió el año 1914.
Hace juegos verbales que son,
en realidad, sátira metafísica.
No se mete con nadie:
únicamente juega con situaciones absurdas.
100 Hoy vuelves como siempre, primavera,
cuando a tu luz ya había renunciado
y el corazón está desconcertado
por este gozo nuevo que le altera.
127 SALMO INICIAL
Señor, no estas conmigo
aunque te nombre siempre.
Estás allá, entre nubes,
donde mi voz no alcanza,
y si a veces resurges,
como el sol tras la lluvia,
hay noches en que apenas
logro pensar que existes.
Eres una ciudad detrás de las montañas.
Eres un mar lejano que a veces no se oye.
No estás dentro de mí.
Siento tu negro hueco
devorando mi entraña,
como una hambrienta boca.
Y por eso le nombro, Señor, constantemente,
y por eso refiero las cosas a tu nombre,
dándoles latitud y longitud de Ti.
Si estuvieras conmigo yo hablaría de cosas,
del cielo, de la brisa, del amor y la pena.
Como un feliz amante que dice solo:
"Mira qué pajaro, qué rosa,
qué sol, qué tarde clara",
y vierte así en la luz de los nombres su amor.
Pero no. Tú me faltas. Y te nombro por eso.
Te persigo en el bosque detrás de cada tronco.
Te busco por el fondo de las aguas sin luz.
¡Oh cosas, apartaos, dadme ya su presencia
que tenéis escondida en vuestro oscuro seno!
Marcado por tu hierro vago por las llanuras
abandonado, inútil, como una oveja sola...
Hombre de Dios me llamo. Pero sin Dios estoy.
* ORACIÓN POR NOSOTROS LOS POETAS
Señor, ¿qué nos darás en premio a los poetas?
Mira, nada tenemos, ni aun nuestra propia vida;
somos los mensajeros de algo
que no entendemos.
Nuestro cuerpo lo quema una llama celeste;
si miramos, es sólo para verterlo en voz.
128
No podemos coger ni la flor de un vallado
para que sea nuestra y nada más que nuestra,
ni tendernos tranquilos en medio de las cosas,
sin pensar, a gozarlas en su presencia sólo.
Nunca sabremos cómo son de verdad las tardes,
libre de nuestra angustia su desnuda belleza;
jamás conoceremos lo que es un humano
en sus profundos bosques
donde hay que entrar callado.
Tú no nos das el mundo para que lo gocemos,
Tú nos lo entregas para que lo hagamos palabra.
Y despues que la tierra tiene voz por nosotros
nos quedamos sin ella, con sólo el alma grande...
Ya vez que por nosotros es sonora la vida,
igual que por las piedras lo es el cristal del río.
Tú no has hecho tu obra para hundirla en silencio,
en el silencio huyente de la gente afanosa;
para vivirla sólo, sin pararse a mirarla...
Por eso nos has puesto a un lado del camino
con el único oficio de gritar asombrados
En nosotros descansa la prisa de los hombres.
Porque, si no existiéramos,
¿para qué tantas cosas inútiles y bellas
como Dios ha creado,
tantos ocasos rojos,
y tanto árbol sin fruta,
y tanta flor,
y tanto pájaro vagabundo?
Solamente nosotros sentimos tu regalo
y te lo agradecemos en éxtasis de gritos.
Tú sonríes, Señor, sintiéndote pagado
con nuestro aplastamiento de asombro y maravilla.
Esto que nos exalta sólo puede ser tuyo.
Sólo quien nos ha hecho puede así destruirnos
en brazos de una llama tan cruel y magnífica.
... Tú que cuidas los pájaros que dicen tu mensaje,
guarda en la muerte nuestros cansados corazones;
dales paz, esa paz que en vida les negaste,
bórrales el doliente pensamiento sin tregua.
Tú nos darás en Ti el Todo que buscamos;
nos darás a nosotros mismos, pues le tendremos
para nosotros solos, y no para cantarte. (1943).
133 La tierra es carne nuestra.
134 ¿Para qué combatir, si no hay remedio,
si te han cambiado todo, hasta la tierra,
hasta el cielo, la luz y el horizonte?
135 ¿Qué habrán sido los hombres en tus ojos?
137 ORACIÓN A LA MUERTE
No soy digno de que entres en mi casa,
oh Muerte, todavía, pero dame
alzame a ti con tu presentimiento.
No estoy maduro, no, Muerte, lo noto
en un brusco temblor que me deshace
cuando pienso tu nombre de repente.
Aún yo no sé quién soy, aún no me he hallado;
ando en mi alma de paso todavía
hasta que logre, al fin, en mí asentarme.
No, no vengas ahora; tú no puedes
a destiempo llegar, hija del Tiempo.
Tú que eres solución de plenitudes
espera que sazone con los astros.
Dórame con tu sol como una fruta
que cuando esté madura ha de caerse,
quémame lentamente con el fuego
de tu nombre pensado sin descanso,
hasta quedar desnudo, escueto y puro.
Cuando sea el que soy, entonces llámame;
única solución de la victoria.
144 ... Lo que creemos nuestro
no es más que la obediencia a un oscuro destino.
151 ... hay un poeta... que oye
la tenue voz sin letras de la sombra...
154 ... Yo soy el camellero
que partió hace cien años
y olvida poco a poco su nombre y su destino;
y perdido entre dunas, fuera del tiempo,
arrea su triste caravana de costumbres vacías.
* 155 cazando pajarillos, por distraer mi angustia.
Aún me queda en la boca sabor de paraíso.
156 fluye mi manso vaho
de oración sin palabras...
tiene carne de tiempo y una altura lentísima
amasada en constancia, como una cordillera.
159 I said to my soul, be still,
and wait without hope
for hope would be hope
for the wrong thing; wait without love
for love would be love of the wrong thing;
there is yet faith
but the faith and the love and the hope
are all in the waiting.
T.S. Eliot, "East Coker"
164 Es primavera, pero no sé si abril o mayo;
se olvida el transcurrir del tiempo, ...
... boca insaciable. ...
...
Y hay tanta eternidad disuelta en estas horas,
que ya ignoro mis años. ...
166 No sé; tal vez si... un día,
las cosas me dieran su secreto.
Pero estoy solo, triste,
afanado en los días de trabajo sin fruto,
vencido por el cuerpo,
como trapo que cae
y el viento aparta a un lado...
...
Pero esta tarde clara,
... exige que el alma esté dispuesta
para su goce pleno,
... Y si Te invoco, y clamo ahora con tu nombre,
es que quiero sentirte en mi garganta al menos.
167 Wer jetzt kein Haus hat,
baut sich keines mehr.
 Rilke, "Herbasttag"
168 Por las fotografías de mis libros andaba, ...
Tengo tantos recuerdos de donde nunca estuve...
170 Éste es el tiempo triste
de nacer con recuerdos.
176 ... soy, ... una larga memoria,
sonora y palpitante.
178 Yo ya te conocía del país de los sueños.
179 los tranvías sonámbulos,
con luces purísimas, alegres, inconscientes,
en la triste negrura que se marcha.
180 En el Edén no había lluvia. ...
181 No se sabía qué eran lágrimas. ...
La lluvia ha sido dada al hombre
para consuelo en el destierro;
como el amor y la belleza,
como el recuerdo, como el sueño.
184 Se hacía más cariñoso
cuando el invierno llegaba.
187 ... ve el color
de lo dicho, sin entenderlo.
192 ... y, confiado, al sueño
entregarse y disolverse...
194 Entre tus manos hoy lo dejo todo
para entrar a la vida más ligero,
195 y cúrame el pasado con caricias,
 Sí, porque siempre he estado allá, remoto,
como escondiéndome en mi propio espectro,
201 Y en soledad, bebiendo el largo vaso,
o tras la máscara de un serio oficio
distantes, guardan su secreta droga
para entrar a la cita con el prójimo,
en el pozo caliente de sonido
donde zuma el murmullo de los tiempos
...
Y al encerrrarse...
arrodillados como ante un micrófono
sin nadie y...
... posar ... en la carne
universal, y, ... , vivir, ... 202
...
203 a esa hora sentías tú la vida
golosamente...
210 ... Su "Don", sus gafas, su sombrero,
ocupando un espacio tan exacto
de la vida, hecho sólo humilde lujo
de opinión en su mesa de oficina;
...
también hay una isla donde puede crecer,
salir al fin de su periódico,
abrir paso a los siglos;
212 ... con tu paciencia del tamaño del mar,
aguantándolo todo,
hasta su estupidez,
su mala entraña nativa,
213 ... nos enseñabamos
uno a otro a rezar;
215 Para eso tienes espaldas
de tamaño de tronco benévolo
y manos de arador, suaves de tanto barro,
y ojos todos de pupila.
... con tus grandes pisadas ...
... Ea, agarrad el remo, ...
220 con el viejo mapa en colores
de mis obligaciones,
largamente luché contra mi propia seguridad,
milité en la terquedad, me exhorté a lo inútil.
...
un saboreo a traición del argumentarme,
un prohibido placer en el concepto,
ciertos deseos de canturrear en el cansancio,
222 ... terremoto... noche de amor geológico,
258 ... ebrio de sueños...
262 de tierra a cielo,
era lugar del crimen
¿Todo estaba perdido? ...
... Entonces Ella sintió doble dolor,
como si el Hijo huyese de su carne,
renegándola,
de su trampa de huesos
Y la Madre cargó con el horror
de los hermanos asesinos,
227 se vendió el porvenir, en fe multiplicado.
285 Y hay que pensar en cosas tan grandes
que nos hagan sentir calor por dentro,
consuelo de estar vivos
y aun ganas de morir un poco por su nombre.
287 "Soy el que soy"
288 una marea hirviente de placer.
290 EL CIELO ENVENENADO
 295 ... un día
puso su estudio - harén, en olor de arte,
... de dudosos tipos despeinados.
... Yo, si sacio la tripa
y resguardo del viento mi piel,
ya estoy contento;
298 En el tren del trabajo, los modestos,
los pobres sin miseria, filosofan,
299 Colgado, entre la luna y las nuves,
de noche, en mi rincón de luz,
leo, aislado, al arrullo,
302 el intelectual ¡pobre!
sigue siempre en las nubes.
308 Don Quijote moría de cordura,
311 VIDA ES ESPERANZA
¿De qué sirve el destello del Siglo de Oro
al cansado?
no hay ni cultura... ni estirpe... en sus bocas,
sólo el escueto ademán
del que afianza la carga en los hombros.
Él que es siervo no habla español,
ni habla inglés, ni habla nada;
su palabra es la mano de un náufrago
que se agarra a las olas,
y las cosas le pesan y embisten
sin volverse lenguaje.
313 se me ha vuelto una piedra en la conciencia,
314 ... y somete a su interés la misma rebeldía,
321 ... todos los países, uníos:
no tenéis más que perder
sino vuestras aduanas...
... la historia puede acabar,
por un error estúpido,
326 ... el vulgo nunca debe
entender su liturgia,
porque toda, en el fondo,
consiste en dar mil vueltas deprisa
a los dineros sacados a ese vulgo,
" ... se vendió el porvenir, en fe multiplicado..."
... Todo el lenguaje está comprado por los amos,
les excusa y esconde, y al robado ignorante
le hace más respetuoso ante el vago sistema.
... hasta el pájaro y el árbol
y el río te escatiman las leyendas.
329 ... apenas callamos,
se alza otra vez en nosotros
la pregunta, el grito, la rebeldía:
si hablamos, si subimos hasta meter
el mundo en palabra
y en palabra pensarlo y abolirlo,
no podemos aceptar morir
en silencio para siempre,
333 ¿no ves qué bien sabemos
engañarnos a fuerza de sinceros,
de auténticos, de fieles a nosotros mismos,
de derretidos en hablar por hablar?
339 la civilización "cristiana - occidental"
- "cristiana",
muchos siglos de golpear con la cruz
para robar al pobre y asesinar al débil -.
342 EL DÍA DEL PERDÓN
¿Por qué, en la edad propicia a la memoria,
no repaso el pasado a mi sabor,
y mi imagen, al verla en otro tiempo,
me inquieta, como el eco de mi voz?
Y no es que crea ser mejor ahora:
es el ver desde lejos cómo soy.
Tendrá que haber un día en que me pueda
servir el vino, hablarme sin rubor:
tendrá al final que haber quien me reúna
en paz conmigo mismo en el perdón.
¿Por qué, ante los que viven
desangrando al prójimo,
no acierto a alzar la voz,
por más que estudie atento
las astucias de su arte, y su saberse dar razón?
Mucho tengo y tenemos compartido
con ellos en el propio corazón:
tendrá que haber un día
en que nos juzguen a todos
y nos quemen en amor;
tendrá al final que haber quien nos reúna
a todos en un fuego de perdón.
357 De fuente joven recibió...
... el lenguaje de los dioses,
... Os es lícito vivir
mientras tengáis aliento; ...
... tiempo aquel por quien habló el espíritu.
361 Sólo por ti se encierran los poetas,
juntando estampas, ricas y sonoras,
y vagan, y maduran comparando
y están toda la vida siempre solos...
* 364 ... con pasitos rígidos,
vuelta a casa, bien cogidos.
368 EL POETA
Hora, te alejas de mí.
Me hiere el golpe de tus alas.
Solo, ¿qué haré yo con mi boca?
¿Y con mi noche? ¿Y con mi día?
No tengo ni amada, ni casa;
no tengo sitio donde habite.
Las cosas, a las que me entrego,
se enriquecen y me disipan.
* 372 ... Jugamos a cogerte,
... lo logra el más alegre.
... largos pesados troncos:
... están cantándolo.
384 ... para acogerme aguardaba...
dándome... poco a poco;
... así se mueve la imagen del amor
puesta en el alma... con líneas de fuego.
... la alegre paz de amar
estando en la presencia de la criatura amada;
...
Late un deseo en nuestra... alma:
darse por libertad a un Ser...
a un Ser desconocido...
388 CHRISTAN MORGENSTERN
EL RELOJ DE KORF
Korf inventa un reloj muy importante:
con otro par de manecillas más,
además de marchar hacia delante,
también va igual de rápido hacia atrás.
Al dar las dos, serán también las diez:
a las tres, son las nueve sin error:
basta que lo miremos una vez
para que el tiempo no nos dé temor.
Pues en ese relój,
igual que Jano, hacia uno y otro lado,
(para eso se inventó)
el tiempo se ha a sí mismo superado.
391 NOVALIS
De Himnos a la noche
... 393 ... Y nos regalas alegrías
oscuras e indecibles,
secretas, ....
alegrías que nos
dejan presentir un cielo.
...
sin necesidad de luz,
miran a través de las profundidades
de un amante corazón,
397 Bertolt Brecht
... en el primer tercio del siglo XX
dejaron ya de pagarse las poesías
...
¡No comáis tan despacio!
¡Se enfrían nuestras sobras!
402 Thomas Merton
cabalga enloquecido de sol
por las laderas de su corazón,
403 ROBERT FROST
EN LO MÍO
Mucho me gustaría que esos oscuros árboles
que, de viejos y firmes, muestran la brisa apenas,
en vez de ser el mero disfraz de la tristeza,
se extendieran llegando al borde del destino
El mejor día, nadie me podría impedir
que escapara, furtivo, hacia sus vastedades
sin temor de encontrar tierra abierta jamás,
ni ruta en que la lenta rueda vierta la arena.
No sé por qué tendría que volver a atrás nunca,
ni por qué no vendrían a seguirme las huellas,
para alcanzarme,
aquellos que sientieran mi falta
y quisieran saber si les sigo queriendo.
Me hallarían el mismo que conocieron siempre:
tan sólo más seguro de cuanto creí cierto.
411 WALT WHITMAN
DE LA TERRIBLE DUDA DE LAS APARIENCIAS
De la terrible duda de las apariencias,
de la incertidumbre después de todo,
de que quizá nos engañemos,
que quizá confianza y esperanza
sean sólo especulaciones despues de todo,
que quizá la identidad más allá de la tumba
sea sólo una bella fábula,
quizá las cosas que percibo, los animales,
plantas, hombres, cerros,
aguas relucientes y fluyentes,
los cielos del día y noche, los colores,
densidades, formas, quizá sean
(tan indudables como son) sólo apariciones,
y lo que es algo real todavía esté por conocer,
(¡cuántas veces se disparan fuera de ellos mismos
como para confundirme y burlarse de mí!
cuántas veces creo que tampoco sé,
ni nadie sabe, nada de ellos),
quizá pareciéndome lo que son
(como sin duda no hacen sino parecer)
como mi presente punto de vista,
y podrían resultar
(como desde luego podrían )
nada de lo que parecen,
o nada de ningún modo,
desde puntos de vista enteramente cambiados;
para mí esas cosas y sus semejantes
tienen curiosa respuesta en quienes me aman,
mis queridos amigos,
cuando la persona a quien amo
viaja conmigo o se sienta largo rato
dándome la mano,
cuando el aire sutil, el impalpable,
el sentido que no contienen
las palabras y la razón,
nos rodean y nos invaden,
entonces estoy cargado de sabiduría
no dicha e indecible,
estoy callado, no requiero nada más,
no puedo contestar a la pregunta de las apariencias
o de la identidad más allá de la tumba,
sino que cambio o me siento con indiferencia,
estoy satisfecho,
quien me estrecha la mano
me ha satisfecho por completo.
414 ... cantando el falo,
... trémula carne
amorosa doliendo, ...
... los miembros,
... y lo que ello exita,
los delirios místicos,
la amorosa locura,
el absoluto abandono
(escucha de cerca
y en silencio lo que ahora te susurro,
te amo,
¡ah tú me posees enteramente!,
¡ah si tú y yo escapáramos a los demás
y nos marcháramos del todo, libres y sin ley!:
dos alcones en el aire,
dos peces nadando en el mar...
... yo temblando apasionadamente,
el juramento de la inseparabilidad de dos juntos,
... buena gana lo pongo en juego todo por ti,
¡Oh tú y yo!
¿qué nos importa lo que hagan
o piensen los demás?
¿Qué nos importa todo lo demás?
Sólo que nos disfrutemos
y nos agotemos el uno al otro
....
del suave deslizar de manos sobre mí
metiéndome los dedos por el pelo y la barba,
del largo beso prolongado en la boca o el pecho,
el estrecho apretón que me emborracha a mí
o a cualquier hombre, desmayado de exceso,
vocabulario:
419 exuda, rezumar, 417 tamo, 416 panoplia, gárrulo, réprobos, 413 añagaza, goleta, 412 febe, lechigada, 409 escaramujos, 407 perifrástico, 406 malvalocas, vórtice, 402 marcero, 401 yolas, 398 vates, 395 Ateridos, 390 escayola, 384 almenado, 376 mimbrerales, 374 sibilas, 366 lastrar, carillón, 364 soterraño, 357 Pythia, compaña, 355 admonición, empédocles, 352 Orco, 351 délfico, 350 pantélico, 346 rebose, 334 picota, 333 agreste, 327 ardid, 326 inflexión, 308 chapeo, 305 solfa, 298 abyecto, 296 tufillo, 294 faquines, lumbago, machucho, 292 hirsuto, 287 cansina, impertérrito, 280 pringosa, 278 ajos, 277 azuzó, 273 prístino, 271 almagre, trémulas, 248 pedreas, 247 secano, sopor, 240 Sileno, 232 fatídicos, 226 escoria, celajes, 223 gavillas, 219 estupor, 214 riada, 206 hucha, 205 escobén, oblación, 201 transida, 184 racha, 168 medrosos, 156 canchal, 136 vedijas, 134 barruntas, 128 vallado, 123 gualda, 116 tráfago, 110 búcaro, 83 jarcias, metonimias, 77 taraceada, 17 bonhomia, calas, 12 inefable, 11 aludes, 9 teoría de Jano brifonte.
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